domingo, 4 de junio de 2017

Por Londres

Sé que gestos como este no sirven para nada. Hay que emprender una acción seria contra el terrorismo islamista, no solo contra los canallas que ayer sacrificaron sus vidas a cambio de acabar con la de los demás, sino también contra los auténticos asesinos, los que les comen la cabeza a quienes finalmente ejecutan dichas acciones: esos están vivos y siguen en libertad, probablemente financiados por otras personas aún más siniestras y peligrosas que manejan grandes fortunas y a las que nunca se les va a hacer nada.

Pero quien escribe estas líneas no puede dejar de sentir pena y solidaridad hacia una ciudad que ama especialmente, así que ahí va este Nimrod de Elgar en intensa –más que melancólica– interpretación de Daniel Barenboim y la Orquesta de West-Eastern Divan filmada en Ramala en 2005.


1 comentario:

FERITO dijo...

Todo un acierto por la sensibilidad especial al escoger la pieza y a sus intérpretes en un lugar emblemático totalmente concernido, refrendado por la imagen del propio auditorio. Aplausos.

El Trío de Tchaikovsky, entre colegas: Capuçon, Soltani y Shani

Si todo ha salido bien, cuando se publique esta entrada seguiré en Budapest y estaré escuchando el Trío con piano op. 50.  Completada en ene...