¿Y la interpretación? Pues empeoro mi impresión inicial, que era positiva: irreprochable desde el punto de vista filológico y llena de esa energía, esa extroversión, ese gran sentido teatral y esas ganas de comunicar que caracterizan al director francés, eso es indudable, pero también muy basta, vulgar y de cara a la galería. En realidad Minkowski hace lo de siempre, que es ni más ni menos que lo habitual en los directores que buscan el aplauso por la vía fácil: irse a los extremos de la gama dinámica sin cuidar las gradaciones intermedias, contrastar todo lo posible los tempi haciendo más lentos los lentos y precipitándose en los rápidos, agitar a la orquesta en plan efectista sin atender al detalle y abusar de la percusión. Todo muy vistoso y muy primario.
También es cierto que en esta ocasión no hay problema a la hora de confundir, como le pasa tantas veces a este señor, el vuelo lírico con la frivolidad o la cursilería, entre otras cosas porque la música rococó demanda una buena dosis de levedad bien entendida; Minkowski sintoniza con ello plenamente y de este modo ofrece momentos “reposados” francamente bellos. Por eso mismo, y por las virtudes antedichas, no creo que se trate de un mal disco, sino más bien de una realización irregular que no hace plena justicia a la calidad de la música de Rameau como si lo han hecho, también en el terreno de suites orquestales, Frans Brüggen y Jordi Savall: precisamente del doble compacto de este último titulado La orquesta de Luis XV me gustaría hablar pronto.
Les dejo con una pequeña comparación para aclarar las ideas: el célebre rondeau de los salvajes de Les Indes Galantes interpretado primero por el gran William Christie (en la fantástica producción con coreografías de la granadina Blanca Li) y luego por el señor Minkowski en plan... Pues eso, muy salvaje.
4 comentarios:
Exacto. Siempre he pensado que los "Sauvages" de Minko son demasiado "salvajes". Brüggen, en su disco de la suite de Les Indes, marca un punto intermedio entre la finura de Christie y la brusquedad de Minkowski.
Con todo, Minkowski ha hecho cosas estimables en el barroco francés. Aunque hace una eternidad que no lo escucho, guardo buen recuerdo de su Plateé en Erato
Yo conozco el Plateé de Minkowski en imágenes, precisamente con Agnew. Me gustó mucho la dirección, pero de esto ya hace años. Es muy posible que si volviese a ver esa filmación cambiase de opinión.
Un poco cruel por tu parte poner juntas la versión de Minkowski con la de Christie.
Nadie interpreta a Rameau como Christie.
Para mi los mejores interpretes de las suites orquestales de Rameau son Bruggen y Savall. Respecto a esta grabacion no debe ser mala cuando se ha hecho hasta una edicion en LP de 180gr.
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