lunes, 2 de junio de 2025

Kubrick y la música: pura pedantería

Ahora que ando preparando una comparativa del Zaratustra straussiano,  no tengo más remedio que hacer una confesión: detesto el uso que de la música clásica hizo Stanley Kubrick en sus películas. Por dos motivos.

El primero, me parece una monumental pedantería: como él no hace cine de consumo, sino obras de arte porque él lo dice: Lubitsch, Ford, Hawks y Hitchcock eran mil veces más artistas que él no puede rebajarse a colocar sobre su estudiadísimo celuloide cualquier cosa. Menos aún adocenado sinfonismo cinematográfico made in Hollywood. Solo vale gran música. De paso, demuestra que conoce a Penderecki o a Ligeti en unos momentos en los que todavía la mayoría de los melómanos tenía que lidiar con ese repertorio. Pero claro, él tiene una sensibilidad especial.

Segundo, condenó a música que efectivamente son grandísimas a ser asociadas en la memoria popular con algo que no tienen nada que ver con ellas. El caso de Así habló Zaratustra es evidente, pero más molesta el asunto en El resplandor: como la música de Bartók suena rara, pues nada, hay que asociarlas a imágenes de terror.

En cuanto a las espléndidas bandas sonoras originales de Alex North para la primera cinta y Wendy Carlos para la segunda, pues que se vayan a la porra y que nadie las escuche. ¡Váyase usted a aquel sitio, señor Kubrick!

No hay comentarios:

Daphnis et Chloé de Ravel, ballet completo: discografía comparada

ACTUALIZACIÓN 25.VI.2025 Añado los registros de Levine/Boston y Pappano. He vuelto a escuchar la de Dutoit, que ahora me ha gustado algo más...