Al terminar una entrevista que le hice en Sevilla hace ya doce años (¡cómo pasa el tiempo!), Marcel Pérès me confesó su deseo de atreverse algún día a aplicar sus tan discutibles como fascinantes parámetros interpretativos a la gran polifonía española del siglo XVI. No lo ha hecho aún, pero lo cierto es que su trabajo con el Ensemble Organum avanza cada vez más tanto en el tiempo como en la radicalidad de sus planteamientos.
Buena prueba de ello es este disco, grabado en noviembre de 2011 y editado por el sello Aeon, que bajo el nombre Lux Perpetua ofrece el Réquiem atribuido por unos a Anthonius Divitis y por otros a Antonie de Févin. En cualquier caso, polifonía franco-flamenca (el primero era de Lovaina, el segundo de Arras) de finales del XV o principios del XVI: una de las hipótesis que plantea Pérès en el libretillo es que esta música pudo haber sonado en el funeral de Felipe el Hermoso en 1506. El CD lo compré el año pasado en mi estancia veraniega en Moissac (enlace) y lo puse varias veces en el coche, pero hasta ahora no había podido disfrutarlo en condiciones: a altas horas de la noche y completamente a oscuras, que es como hay que escuchar esto.
Sobre los parámetros interpretativos no voy a decir mucho, porque el interesado puede acudir tanto a la entrevista arriba citada (enlace) como, mejor aún, a la realizada con motivo de esta grabación por Mark Wiggins para la desaparecida Diverdi (enlace). Solo quiero añadir que a mí me ha encantado: la riquísima variedad de colores desplegada –irritante para algunas sensibilidades por su aspereza–, la manera de aplicar la ornamentación y la tensión que se desprende de la superposición de líneas a pesar de la lentitud de los tempi, hacen de la audición una experiencia sobrecogedora. Y desde luego, muy apartada del equilibrio, la pureza tímbrica y la maravillosa “serenidad renacentista” que en este mismo repertorio aplica, por ejemplo, Paul van Nevel con su Huelgas Ensemble, pues Pérès y su grupo miran en su lugar hacia los intensos y muy dramáticos claroscuros del Gótico tardío.
Quizá no esté de más recordar que hacia 1500, y con las monarquías autoritarias todavía por consolidarse –la primera en hacerlo es precisamente la de nuestros Reyes Católicos–, la mayor parte de Europa respiraba por completo la cultura tardogótica, y que el Renacimiento no era sino una vanguardia solo plenamente comprendida, de momento, en aquellas tierras del norte de la península italiana donde había nacido. Ánimo: abran la mente y escuchen este disco.
Ah, Marcel Pérès estará en Ronda a principios de julio (enlace), aunque yo no podré ir porque me voy de viaje a Sicilia: el diálogo entre arte Islámico, Bizantino y Románico, que por cierto tiene muchísimo que ver con las maneras de hacer del Ensemble Organum, me apetece una barbaridad…
Un cajón de sastre para cosas sobre música "clásica". Discos, conciertos, audiciones comparadas, filias y fobias, maledicencias varias... Todo ello con centro en Jerez de la Frontera, aunque viajando todo lo posible. En definitiva, un blog sin ningún interés.
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2 comentarios:
Mientras aquí, en el sur, a pesar del calor, seguimos con el boicot. Somos incansables.
El pobre Pérès no se merece esto. Mejor aquí:
http://flvargasmachuca.blogspot.com.es/2013/06/barenboim-y-la-prensa-resumiendo-que-es.html
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