viernes, 1 de marzo de 2013

El cuarteto, de Dustin Hoffmann: una imprescindible delicia

Ayer aproveché mi estancia en Jerez de la Frontera facilitada por el puente del Día de Andalucía para ver El cuarteto, la película con la que Dustin Hoffmann ha debutado en la dirección cinematográfica: una obra amable, rodada con tanta corrección como sensibilidad, cimentada en un buen guión y maravillosamente interpretada por un puñado de venerables actores de la escena británica. A lo que mi amigo Juan José Roldán ha escrito en su blog sobre la misma, que suscribo punto por punto, me remito.



Por mi parte solo quiero insistir en que el visionado es obligatorio para los amantes de la música clásica, no solo porque esta es la médula espinal de la cinta, incluyendo la banda sonora que Dario Marianelli ha escrito a partir del cuarteto que le da nombre, que no es otro que el de Rigoletto, sino también porque la mayoría de los secundarios son artistas reales que como cantantes e instrumentistas han formado parte de la intensísima vida musical británica de los años sesenta, setenta y ochenta. A la cabeza de ellos, la mismísima Gwyneth Jones, que no solo se muestra tan excelente actriz como siempre sino que además se permite cantar a sus setenta y siete años el Vissì d'arte; impagable guiño el momento en el que ella, enorme Desdémona en su momento, comenta las penalidades de Freni mientras ve en el televisor el Otello de la modenesa con Vickers. Lástima que muchas escenas musicales quedaran fuera, como nos dice la propia soprano en la siguiente entrevista.



Una cosilla más, aunque nada tenga que ver con la música. Si esta película es un homenaje claro a nuestros mayores, en la versión española también lo es a los magníficos actores de doblaje que teníamos hasta no hace mucho en nuestros país. A contracorriente -salvando honradas excepciones- de lo que hoy es habitual, ¡qué bien doblada está Quartet por estos veteranos! A destacar la presencia de la enorme Matilde Conesa (Ángela Channing, Bruja Avería) prestando su voz precisamente a Dame Gwyneth. En inglés o en castellano, no se la pierdan.

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