domingo, 13 de marzo de 2022

Ariadna en Naxos desde el Met: triunfo de Lise Davidsen

Estuve ayer sábado en los Cines Yelmo viendo la retransmisión en directo de Ariadna en Naxos desde la Metropolitan Opera. Lo hacía en la antigua producción de Elijah Moshinsky, bien conocida por los aficionados gracias a la filmación realizada en su momento que protagonizaron Norman, Battle, Troyanos y Levine (error mío, ver comentarios abajo). Desdichadamente, yo no conocía ese vídeo. Me ha gustado bastante: tradicional en el mejor de los sentidos, visualmente agradable, sensata y muy bien resuelta. Lo personajes no están caricaturizados más de lo necesario y se diferencia bien entre las dos mitades de la función. Sí que hay una cierta tendencia a la acumulación de figurantes y a sacar niños haciendo monerías, todo ello muy del gusto del Met, pero se sirve muy bien tanto a la música de Richard Strauss como al libreto de Hugo von Hofmannsthal. En un título como este no caben esos experimentos con la dramaturgia tan caros a muchos temibles registas de hoy día.

Dirigía, a sus 83 añitos, nada menos que Marek Janowski. Creo que lo hizo bien, a secas: todo en su sitio, manteniendo el pulso teatral en el prólogo, ofreciendo una buena dosis de animación e incisividad durante la comedia y dejando cantar a la cuerda durante las escenas mitológicas. No encontré especial magia ni inspiración, pero el conjunto funcionó sin fisuras.

Triunfo monumental de la soprano noruega Lise Davidsen. Correcta en el prólogo, su aria de entrada como Ariadna tuvo algún que otro reparo –desigualdades, notas algo duras–, pero fue mejorando poco a poco y en la hermosísima, sublime escena con Baco dio lo mejor de sí misma haciendo gala de una voz por completo adecuada, de una línea de canto ya sin fisuras, de un estilo perfecto y de una intensidad expresiva al máximo nivel posible. Junto a ella, Brandon Jovanovich hizo lo que pudo –y sufrió algún accidente vocal más o menos sonado– en su rol imposible. ¿Odiaba Strauss a los tenores? Sean Michael Plumb sí que estuvo muy bien como Arlequín. Irreprochables las tres ninfas.


Brenda Rae fue Zerbinetta. Agilidades las tiene todas, pero la voz no es muy atractiva, chilla los sobreagudos y anda algo corta de fiato. Sus insuficiencias musicales las compensa con una perfecta caracterización del personaje, al que sabe dotar de toda su frescura y su erotismo sin desatender su faceta melancólica.

En lo que al prólogo se refiere, Isabel Leonard encajó sin problemas en el rol del compositor, y todos los demás papeles estuvieron estupendamente servidos. Resultó entrañable encontrarnos con Wolfgang Brendel en el rol del mayordomo.

En definitiva, una función no excepcional pero sí de buen nivel que a mí me ha servido para reencontrarme, después de años sin escucharla, con una maravillosa obra maestra que debería interesar mucho más a nuestros teatros del ámbito mediterráneo que parecen no salirse del sota, caballo y rey.

2 comentarios:

antonbg dijo...

Hay un pequeño error en tu critica, la grabación que mencionas cantan, Deborah Voigt, Natalie Dessay, Susanne Mentzer, Richard Margison, Nathan Gunn, publicada por el sello Virgin Classics, la producción de los 80 es de Bodo Igesz, es un placer leerte.

Fernando López Vargas-Machuca dijo...

¡Efectivamente! Me he confundido porque en el intermedio pusieron a la Norman ataviada igual que la Davidsen, así que pensé que era la misma producción. ¡Muchas gracias!

¡Gracias a los valencianos!

Me dicen mis editores que en la Feria del libro de Valencia el volumen de Barenboim se está vendiendo bastante bien. No sé cuánto es "b...