jueves, 26 de noviembre de 2020

La Grande de Schubert por Barbirolli

Esta versión de La Grande de Franz Schubert la grabaron Sir John Barbirolli y su Hallé Orchestra en el Kingsway Hall de Londres en junio de 1964 para EMI. Tuvo poca circulación en compacto. Warner la ha recuperado en su enorme caja –al final la compré: el vicio es el vicio– dedicada al director británico con un espléndido sonido que nos permite disfrutar plenamente de una interpretación más que notable, por descontado que en edición “tradicional”: con introducción lenta y sin regulador al final.


Creo que el gran acierto de esta lectura es encontrar el punto justo entre dos extremos en los que es bastante fácil caer en esta obra: la pesadez y la ampulosidad por un lado, la ligereza y la frivolidad por otro. No hace falta decir que los muy partidarios de lo “históricamente informado” encontrarán esta recreación en exceso morosa. Para mí no lo es. Antes al contrario, me parece un modelo de equilibrio, moderación y sensatez. Dicho esto, creo que hay algunas irregularidades.

No me termina de convencer el Andante introductorio, bien paladeado pero quizá sin la expresión adecuada, y menos aún cómo resuelve Sir John la transición al Allegro ma non troppo. Este último sí que lo encuentro por completo irreprochable, soberbiamente expuesto y dicho con intensidad muy controlada, si bien la coda me parece discutible.

Magníficos los dos primeros tercios del Andante con moto, dichos con ese fraseo justo que permite avanzar con fluidez y agilidad sin caer en lo pimpante, al tiempo que rezuman decisión y virilidad bien entendida. Al gran clímax se le podría sacar mayor partido, mientras que a ese momento increíblemente bello que supone la entrada de los violonchelos tras el silencio le falta el imprescindible sabor amargo. A partir de ahí está bien, a secas. Impresionante, como en toda la interpretación, el análisis del entramado orquestal que realiza la batuta.

No hay reparos para el Scherzo, musculado en su punto justo y con apreciable nobleza en un Trío cuyas maderas está tratada con mano maestra. Y espléndido el Allegro vivace conclusivo, a pesar de que el tema “Himno a la Alegría” podría quizá ser todavía más emotivo. En cualquier caso, el maestro nos atrapa de principio a fin mezclando depuración sonora, exquisito gusto, convicción y comunicatividad.

3 comentarios:

Observador dijo...

Fernando:

¿Tengo entendido que las versiones que a ti más te gustan de "La Grande" son la de Barenboim con la Filarmónica de Berlín y la de Furtwängler con la misma orquesta, verdad?

Fernando López Vargas-Machuca dijo...

Exacto, y añadiría la de Furt con la Filarmónica de Viena en estéreo.

Observador dijo...

Sí, la estéreo fue grabada el 30/VIII/1953 por Alfred Kunz y publicada en CD (2005) por TAHRA FURT 1095-1097, con autorización de la sra. Elisabeth Furtwängler.

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